Por lo menos 10 patrullas motorizadas con agentes fuertemente armados, fueron necesarias para detener a un par de ladrones que kilómetros antes habían hurtado una tractomula, en cuyo interior llevaba un cargamento de licor de varias marcas exclusivas, valorado en más de 300 millones de pesos.
Los uniformados se vieron obligados a disparar contra las llantas del vehículo varías veces, y en pleno rodamiento, ante la negativa de sus ocupantes a acatar el pare. Al final, el automotor logró ser interceptado, ya cuando se encontraba en las calles de ingreso a Medellín. Los ladrones fueron detenidos y llevados ante los jueces.